El último suspiro de Lluís Botinas

por Franju Serra

Lluís Botinas

Conocí a Lluís Botinas gracias a los Dres. Meulemans y Elías, un matrimonio de eminentes científicos, médicos psiquiatras, lingüistas, rescatistas y diplomáticos descubridores de la ciencia que ellos mismos acuñaron como endolingüística. Empecé a estudiar con ellos en 2012, cuando impartían sus seminarios en Tepatitlán de Morelos, Jalisco, México. En casi cada seminario, que eran mensuales, mencionaban a Lluís Botinas. Se referían a él como su hijo “putativo”, entendiendo este concepto jurídico como hijo atribuido. Los Dres. Meulemans y Elías perdieron a su único hijo, Didier Elías Meulemans, quien falleció en misión de rescate en Tamaulipas, México, en el Huracán Gilberto en septiembre de 1988. Posiblemente a raíz de haber perdido a su único hijo biológico iniciaron con la original costumbre de adoptar simbólicamente a algunos hijos putativos, solo a unos pocos privilegiados que se hubieran ganado verdaderamente un lugar especial en su corazón por su nobleza y sus altos valores éticos. Lluis Botinas fue uno de esos pocos privilegiados, a saber, el único de la península ibérica.

 

A raíz del fallecimiento del Dr. Elías, el 27 de julio del 2014, me sentí con la obligación moral de mandarle un correo a su hijo putativo. Así fue como empecé una relación epistolar telemática con Botinas. A día de hoy, ha pasado una década y casi dos semanas de ese entonces. Durante esta década he tenido la oportunidad de visitar a Lluís y a Elba, su esposa, en Barcelona en dos ocasiones. Ambas fueron veloces, muy especiales e intensas. Pude conocer por fin en persona a un Botinas protagonista de decenas de anécdotas contadas por el singular matrimonio Meulemans-Elías. Algunas dignas de películas de acción, de espías y de agentes de inteligencia, como su exilio en Suecia, sus tesis sobre el montaje del SIDA o el haber sobrevivido a un atentado en contra de su persona en Colombia recibiendo un disparo en el cuello del cual requirió cirugía para la extracción de la bala. Lluís en esa ocasión no quiso que le pusieran anestesia alguna. También fue protagonista de anécdotas familiares y tiernas con sus padres putativos. Una de ellas fue que lo llevaron a ver una película mexicana en blanco y negro en contra de su voluntad, y que acabó fascinándole; la película fue “Allá en el Rancho Grande”.

 

Conocer a Botinas en persona, para mi, fue ponerle cara y cuerpo a un personaje del encriptado, místico, aventurero y totalmente surreal -aunque al parecer verídico- mundo de los Dres. Meulemans y Elías. Botinas, perplejo y satisfecho al mismo tiempo, no desmintió ninguna de las anécdotas que le conté que citaban en México sus padres putativos.

 

A medida que fui conociendo a Lluis me di cuenta de que tenía ante mí a un ser único, muy especial y totalmente íntegro. Algunos años recibí correos suyos semanalmente, algunas semanas dos o tres correos, en los que difundía archivos adjuntos sobre su versión del SIDA, el ébola, la gripe aviar, el 11S, las vacunas, el genocidio catalán, y más recientemente el COVID.. Siempre difundiendo análisis diferentes y contrarios a las versiones oficiales difundidas por la prensa imperante. En esos correos aportaba detalles técnicos de calidad, inconsistencias e incongruencias de las versiones oficiales, citaba autores disidentes, mostraba formas más congruentes de pensar y analizar las cosas, tiraba del hilo negro, evidenciaba intereses implícitos… Era un incansable buscador y divulgador de verdades ocultas y en ocasiones difíciles de desentrañar por la mayoría de los mortales. Investigar, documentar, difundir y formarse una opinión propia -a pesar de ser casi única y minoritariafue posiblemente el deporte que más practicó Lluís Botinas.

 

Y sí querido lector o lectora, posiblemente hayas advertido que se me coló en el texto una forma de referirme a Lluís en pasado… Así de inesperada fue también la noticia para algunos de sus seres queridos, admiradores y amigos. Lluís Botinas trascendió el 6 de agosto del 2024.

 

Se nos fue un héroe de la resistencia, un revolucionario líder natural del pueblo de Catalunya, un gran referente para muchos hamerianos, un gran ejemplo para los librepensadores, los antivacunas, los provida autorreguladora… Botinas fue impulsor de la cuaterna Vida-Verdad-Libertad-Identidad como grito de guerra, de autodeterminación y de defensa. Fue abanderado de muchas luchas sociales que no salen en los medios de comunicación oficiales en pro a defender los cimientos e ideales de una vida más plena, más libre, más sana, más natural, más congruente y autogestiva.

 

Para quienes estén familiarizados con la saga de Star Wars, o la Guerra de las Galaxias, en la que unos rebeldes revolucionarios llenos de valores y con hambre de justicia se agrupan y se defienden de los ataques de un Imperio dictatorial inhumano y esclavizador; para quienes conozcan esta saga; que se nos haya ido Botinas es como si hubiéramos perdido a un Hans Solo o un Luke Skywalker.

 

Siento el compromiso y la necesidad de que quienes hemos sido conscientes de la labor de difusión de Botinas, y hemos sido tocados por él, sus conferencias, sus vídeos, sus textos, sus correos, incorporemos parte de él, de su persona, de su actuar, y de sus ideas en nuestro día a día, en la medida que podamos.

 

Algo que me fascinó en cierto momento álgido del confinamiento ilegal del 2020 fue descubrir que Botinas creó una categoría lógica y epistemológica nueva en el terreno de la defensa ideológica de ciertos mecanismos de poder. No recuerdo si me lo explicó Jesús García Blanca, el propio Botinas o tal vez ambos. Esa categoría es la de desmontador y está por encima de disidente. A grandes rasgos un disidente es alguien que descubre errores o inconsistencias sustancialmente importantes en la versión oficial de algún tema en concreto. La definición de disidente es universalmente reconocida, se refiere a alguien que está parcialmente en desacuerdo. La categoría que acuñó Botinas, la de desmontador no es tan conocida. Botinas con el SIDA fue un paso más allá y pasó del posicionamiento de no estar de acuerdo en algunos o muchos aspectos (disidente), a descubrir y comprender que a lo que se enfrentaba ideológicamente era a un montaje (desmontador). Y todo montaje es algo que no existe inicialmente, que se construye y que en esa construcción se van armando piezas que estructuran, que crean y que dan forma a algo nuevo que antes no existía. Por ende, el desmontador comprende que está ante una construcción social, política e ideológica que está formada por un entramado de piezas e instrumentos interrelacionados, y que no solamente hay alguna pieza a la que hay que combatir ideológicamente, sino que hay que denunciar, combatir y desmontar todo el engranaje y el montaje. Me tomé la libertad de abrir este paréntesis porque estoy convencido que a Botinas le hubiera encantado que así fuere en este texto.

 

Ruego encarecidamente a quienes estén leyendo estas líneas que vean la entrevista documental “Desmontando el pastel” realizada por Alicia Ninou o Alish. Es un must de la vida y obra de Botinas. Algo que para mi define muy bien una parte importante de Lluis -su forma de ser, su entrega hacia el prójimo, hacia la humanidad y su defensa de la ética y el autosacrificio para favorecer al prójimo-; es cómo termina el vídeo dirigido por Alicia en el que Botinas es el protagonista. Después de no sé cuántas horas de entrevista Alicia agradece a Lluis por la noble labor que ha realizado durante tantos años de desmontar el SIDA. Al oír esas palabras de agradecimiento Botinas se toma un instante para sí mismo para continuar con una exhalación llena de alegría y satisfacción ante ese reconocimiento tan honesto y especial.

 

Así es como conservo en mi memoria a Lluís, con esa sonrisa y haciendo ese suspiro de descanso, alegría, satisfacción y de sentir que sus esfuerzos en pro al prójimo están siendo reconocidos.

 

Hasta siempre querido maestro, amigo y guía de la resistencia.
Con gratitud y honor de haberte conocido.
Con mucho amor, cariño y aprecio,
Tu hermano putativo mallorquín,

Franju Serra
Bona nit, nit, Lluís!

10-08-2024

 

PD: A Lluís también le encantaban los postdata, en algunos de sus textos y/o correos tenía incluso más de uno. Adjunto unas notas de Lluís sobre un artículo que escribí en el Punt Avui -periódico catalán- sobre el genocidio catalán en el que cito a Botinas y su tesis del genocidio, un artículo que se publicó 26 meses después de que lo recibieran:

genocidi-silenciat-a-catalunya

 

PD-2: Incluyo también un extracto de 2 minutos de un vídeo de una conferencia de los Dres. Meulemans citando a Botinas durante una conferencia en Monterrey, México, en 1992: Economía es antiecología – Perlas de Maestros – Dres. Elias y Meulemans – Lluís Botina

 

PD-3: Tuve un diálogo con Lluís en 2020 analizando los paralelismos entre VIH/SIDA y Sars-Cov-2/COVID19, fue censurado y eliminado de YouTube pero puede verse en Odysee, en esa ocasión Lluís se despide de nuevo de la transmisión con un suspiro liberador:

Desmontar la «Operación Pandemia Coronavirus» – Lluís Botinas – Plural-21